Una política acertada por parte del Ayuntamiento ha llevado a la recuperación de un espacio estratégico para el desarrollo económico del centro de la ciudad.
El nuevo centro comercial incorpora a parte de los asentadores del antiguo mercado y cuenta con tres potentes polos tractores: Fnac, primer distribuidor europeo de productos de ocio cultural, las tiendas del grupo Zara, ambos con 2.500 m2 de superficie, y el supermercado 'Super Amara'.
Los puestos del mercado tradicional cuentan con unos diseños amplios, materiales de primera calidad, bien iluminados y zonas espaciosas, con lo que se ha ganado de forma notoria con respecto a la anterior situación.
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